antes & después

Cada casa es un mundo y lo que cada uno decide dipositar en ella va más allá del puro valor material de las cosas, vaya que no se compra ni se vende. Cuando decides vivir en tu propio mundo poco a poco y como gotas de lluvia vas llenando huecos y espacios hasta que toman vida y de repente un día empiezas a notar que un olor lo cubre todo pasando a ser algo ya característico y reconocible por los demás con sólo poner un pie.

Mi mundo ha ido conmigo a muchos sitios y ha pasado ya por algunas casas (Valls, Barcelona, Arnedillo, Arnedo, Andorra). Aunque mi mundo se mueve mi nido siempre ha estado en el mismo sitio, he ido y he vuelto muchas veces de la casa de mis padres en Valls, allí empezó a nacer mi inquietud por tener un espacio propio después de compartir habitación durante años con mi hermana, sin drama!! Al tener habitación propia se abrió delante de mí un amplio abanico de posibilidades, quería ponerlo todo dentro pero no me cabía, ese fue el primer aviso de mi recargada visión de los espacios.

Un pequeño apartamento en las montañas de Andorra ha sido el último sitio donde he llevado mi mundo estos años y esta es la muestra de la metamorfosi de un espacio, aviso: no está en venta!!

los faróles, mariposas, lucecitas de Navidad en verano, las velas y el incienso, los espejos, lámparas, fotos con y sin marco, los libros, música, dvd's, cajas con entradas de cine, teatro o conciertos, las postales, pizarras con frases y locuras, los dibujos, targetas de locales por repetir y recomendar y demás esperan su nuevo turno, estan agrupados para poder mantenerse unidos pero hoy les he dicho que descansen un poco que han trabajado muy duro este tiempo, hay que reponer y coger energía no?