No vull podar la selva sinó regar els deserts

El pasado 14 de febrero fué uno de los días más importantes en los últimos 30 años en educación. Al día siguiente, ABC trató la huelga de docentes contra la nueva ley educativa fijándose únicamente en que las aulas se quedaron vacías y destacando un ambiente de enfrentamiento.

Resulta muy fácil criticar y reprochar a los docentes cuando salen de sus aulas para reclamar sus derechos como el resto de profesionales. También es verdad que la educación en nuestro país lleva colgando de su espalda el peso de muchos dinosaurios que por miedo a perder su condición y "privilegios" son los menos interesados en que se produzcan grandes cambios, como siempre en medio hay demasiados conflictos de intereses. Pero siendo un poco sinceros, este no es un problema que afecte únicamente el mundo de la educación.

Lo llamativo de todo esto es que ningún medio de comunicación menciona o reconoce (no es lo suficientemente noticiable) que día a día hay una gran cantidad de educadores que dedican mucho tiempo a reciclarse y seguir formándose, cuidado!! fuera de su horario laboral. Es el caso de las más de 50 maestras de Guarderías de la provincia de Tarragona que desde el pasado 16 de febrero estamos haciendo un curso sobre comunicación y lenguaje (gracias al Centro de Recursos Pedagógicos de Montblanc) pudiendo estar durmiendo o descansando como hace mucha gente los fines de semana.

Para los que no conozcais la problemática surgida a partir de la nueva ley educativa deciros que el problema se centra en que el Consejero de Educación del Gobierno de la Generalitat de Cataluña, Ernest Maragall no negoció en ningun momento sus bases y con la huelga se exigía la retirada de estas. Las bases solamente se han discutido con el Consejo Escolar de Cataluña (CEC) pero este organismo no es de negociación sinó que emite informes que no son vinculantes. Por otro lado el CEC está compuesto mayoritariamente por representantes de la propia Administración, patronales privadas y de las organizaciones empresariales.

De este modo hay varias cuestiones que entran en juego: ofrece esta ley soluciones a los problemas planteados por la educación pública? cual es el nivel de privatización que queremos permitir y podemos asumir? Nos interesa que sean entidades privadas las que gestionen nuestros centros públicos? Queremos una organización de los centros públicos tipo empresarial? Podrá la competitividad resultante de la ley convivir con una organización democrática y participativa (la que defiende la escuela pública)? Somos conscientes de la necesidad de aumentar el presupuesto dedicado a educación para estar a nivel europeo? Disponen los profesores de los recursos suficientes para poder disminuir el número de alumnos por aula y atender al alumnado con más dificultades? .

Educad a los niños y no tendreis que educar a los adultos.