un regalo

Nos empeñanos en encontrar una explicación o un motivo a la mayor parte de las cosas que nos suceden o pasan a nuestro alrededor pero..........no todo tiene un porque (por muchas vueltas que le demos, lo miremos por arriba, por abajo, del ancho o del revés) simplemente hay cosas que pasan y otras que dejan de pasar.

El tiempo que llevo escribiendo este blog me ha revelado algunos secretos y he escuchado su susurro porque detrás había un mensaje con frase. He perdido la cuenta de las veces que me he perdido y me he encontrado de nuevo y a través de esta ventana he visto mis caídas y mis posteriores escaladas, agarrándome a lo bueno que tiene la vida, mucho!

Sigo enfadándome cuando noto que me "estafan" y hay personas que no dan la talla y pasan a otro nivel, me enfado también cuando soy yo la que no doy lo suficiente pero saliendo de esta espiral de sensaciones, lo bueno es que igual como me enfado me desenfado con bastante facilidad porque en realidad no hay que forzar la máquina cuando las cosas pasan o dejan de pasar. A veces me he dicho: me "reservaré" un poco pero no lo he conseguido, las cartas con las que juego están ahí; dicen que las personas no cambían y debe ser verdad porque sigo dejándome conocer (para lo bueno y para lo malo) aunque eso implique asumir el riesgo que algunas veces me puedan hacer daño. He visto que los demás usan la confianza que normalmente deposito como arma para enfrentarse y perderme un poco o como bandera para poder seguir cuidando una amistad, me quedo con las dos si eso es sinceridad y no maldad.

Este domingo, sin una gran explicación, motivo o porque conocí a alguien especial, Carla... y de paso a Carmen (un besote), Laura y María (sus niñas, tan guapas) y a Ernesto. Carla es hoy un regalo...